lunes, 13 de junio de 2011

Un reencuentro de personalidad.

Pasan los días, y a medida que uno va rompiendo esa coraza, ese escudo, el estado de "celosía" va aumentando de manera parcialmente peligrosa.
Ya no sirve el "Tú sabrás" porque se sabe, o por lo menos se entiende, que aunque sea una frase para indagar en la conciencia de cierta persona, en realidad es una frase para limpiar la tuya propia.
Siguen pasando los días, esta vez algo más lentos, pues las horas en vez de encaminarse hacia su crecimiento, permanecen estáticas, mirando como poco a poco todo va volviendo a una normalidad inmoral, algo que permanece en mi naturaleza y que de manera casi "imperceptible" ha ido aflorando desde el comienzo.
Parece mentira, pero no se puede cambiar algo que se te mete en tus entrañas devorándote por dentro...es imposible, ya lo he intentado. Ese sentimiento de posesión con todas las dudas, las preguntas, las cuestiones relacionadas con el autoestima... no dejan de surgir, a cada cual más penetrante, más retorcida, más humillante.
Todo es un bucle que resurge de un recuerdo, de un miedo que de manera invisible se acerca cada día más y que pese a todo sigue adelante, sigue con un sonido que no deja de repetirse "No más de tres, no más de tres"
Levantarse y buscar una solución a algo que no tiene. Comenzar y terminar en el mismo lugar pero de diferente forma, saber que en menos de tres meses todo habrá terminado.

1 comentario:

  1. No pierdas la esperanza.
    Eso no va a suceder, y en el caso de que algo ocurriese, supongo que en ese momento tu pensamiento cambiaría automáticamente. Si ahora surgen dudas, es porque te has dado cuenta de que esa persona realmente te importa, y de ser así, podréis seguir adelante. Siempre hay baches, pero el amor todo lo puede.
    Y digo que si pasase cualquier cosa, siempre tendréis amigos que os apoyaremos en todo y no os dejaremos caer.
    Carol

    ResponderEliminar