miércoles, 22 de febrero de 2017

¡Renovamos!



Hace casi un año que el blog está abandonado. Desde Mensajes en una botella Elugardelodesconocido se ha mantenido en pausa, distante, casi olvidado. Sin embargo, todo era una ilusión. Mientras otros proyectos avanzaban, este hacía un parón para renovarse, mostrar una cara más seria, más literal pero siempre con la misma esencia de siempre. Renovarse o morir, crecer, avanzar. Por ello, estoy más que orgulloso de mostrar la salida de demenciaescrita.com mi nuevo rincón literario. En unos días, la demencia estará más que disponible para comenzar nuevamente a navegar por nuevas historias, nuevas locuras y con varias sorpresas en la recamara que harán partícipe a quien lo deseé. 

Solo unos días, de verdad, tan solo unos pocos.

lunes, 7 de marzo de 2016

Mensajes en una botella


Hoy me he atrevido abrir aquel bote que guardado bajo una bolsa rosa de Tous, reposaba en una de las esquinas de mi escritorio. ¿Por qué hoy te preguntarás? ¿Por qué hoy y no hace un par de meses cuando ilusionada me lo entregabas en aquel restaurante mientras nos observaba más gente de la que podíamos contemplar? Sencillamente porque hoy, era el día.

La organización del cuarto llegaba después de una mañana aburrida, tediosa e incluso un poco desesperante por la poca actividad del lunes que lloviendo, marcaba el inicio de una Semana Santa cercana. Basura, cajón, apuntes, proyectos...¿Esto qué es? Así hasta llegar al objeto que había estado siempre ahí, desde el momento que con un rechazo sincero por un enfado que ya no recuerdo mantenía en el mismo lugar, inmóvil, con polvo y omitido por mi vista cada vez que se paseaba por aquel lugar no tan lejano de mí.

Observaba el contenido de la bolsa con dos objetos independientes: una caja blanca que contenía dentro de ella una taza con un curioso dibujo y la frase impresa "al mejor ex novio" y un frasco de cristal redondeado lleno de pequeños papeles multicolor como si de varios mensajes en una botella se tratase.

No lo pensó dos veces, lo abrió, cogió uno de los 365 papeles que había (uno por cada día del año) y lo leyó. Una sensación agridulce viajó por su cuerpo, y con la curiosidad que le caracterizaba volcó aquel frasco de cristal encima de su cama para leer todos y cada uno de los mensajes que no había sido capaz de hacerlo. "Te quiero porque...", "Te quiero porque...". Todos tenían la misma estructura, y lo más curioso, todos le hacían recordar la situación descrita. Él, que nunca se acordaba de nada, que siempre lo omitía y lo borraba de su mente. 

Estuvo así un par de horas, cuando deseaba guardar todo de nuevo y volverlo a dejar en el lugar que le correspondía leía otro, y otro... A veces se le escapaba una sonrisa, otras por el contrario le trasladaban a momentos y sentimientos agridulces... Era incapaz de dejarlo. Pese a saberlo, se preguntaba por qué ahora, por qué después de casi un año era en ese momento cuando había dado el paso. Era sencillo, había pasado página gracias a una carta que pocos días antes le recordaba que todo había sido un gran aprendizaje.

Una llamada de su mejor amigo le trajo nuevamente al mundo, donde ahora se preparaba para salir y guardar en una estantería a espera de otro momento el leer los 250 mensajes que no había sido capaz, bien por tiempo, bien por agobio o bien por saber que en algún momento los volvería a coger para recordar una de sus etapas más extrañas que había vivido hasta la fecha.






viernes, 1 de enero de 2016

Fuera de planes

No contaba con ello, de hecho estaba fuera de sus planes. Los cuatro días que llevaba en aquel lugar frío, extraño e inseguro se acababa de mezclar en una misma situación.
La incomodidad producida por ver por ver  entre otras cosas como su deseo más reciente se veía afectado por una espera que no iba con él convertía su actitud positiva y enérgica en la oposición más  incómoda que habría sufrido en los últimos 31 de diciembre.

Sin embargo, y pese a todo, seguía buscando la manera de encontrar una solución en un hecho que ahora se proclamaba común, tan común como dejar de lado toda aquella parafernalia de música, bebida y ambiente para centrarse en una hoja de papel y escribir; sabiendo que en un breve periodo de tiempo eso le conllevaría a tener problemas.

miércoles, 13 de mayo de 2015

POSITIVIDAD

Lo siento, pero odio enormemente las personas negativas.
Esas personas que por muy bien que se comporten con el resto del mundo, su comportamiento de cara a la vida es negativo.
Ese tipo de personas que está enferma y piensa que tiene la peor enfermedad del mundo o que lo piense cuando tú te encuentras así.
Ese tipo de personas que está más pendiente del resto, que de ser feliz. De preocuparse por cosas absurdas y no ver la belleza en cosas tan simples del día al día.
Lo siento, pero en mi vida quiero gente con ambiciones, ilusiones, alegría, metas, carácter, búsqueda de nuevas experiencias... que no dependan de otras personas para ser feliz...Personas que cada vez que les vea tenga intriga por saber qué pasará, qué sorpresa me deparará, todo de manera improvisada y natural.
Quiero en mi vida personas que sean capaces de trasmitir esa felicidad al resto, esa energía que desprenden y se contagia.
Una sola persona negativa, es capaz de arruinar la vida más feliz. ¡No lo permitas!

lunes, 2 de marzo de 2015

Playa.

Encontrarla en la playa fue sin lugar a dudas el momento más dulce de mi existencia. 
Su sonrisa con luz propia fue la culpable de que a día de hoy siga buscándola por las esquinas. Su personalidad, unida a esa belleza tan perfecta, no ha hecho desde entonces preguntar en qué momento no opté por mantenerla lo más cerca a mi persona.
Pese a los años que han pasado, esa luz sigue sin desvanecerse, con la incertidumbre de si en algún momento mi ilusión acabe por eliminarla. Quién sabe sino lo ha hecho ya, por el deseo que todos tenemos de encontrar ese algo que nos haga levantarnos por las mañanas con un poquito más de ganas.

viernes, 19 de septiembre de 2014

La duda

Dudó de su decisión. Pocas veces lo hacía pero cuando se atrevía a ello siempre se equivocaba, por ello nunca lo hacía. La mirada con duda, y eso le hacía no aventurarse a la decisión de seguirla. 
Esta vez, no siguió Su camino, la duda pudo con él...¿cómo iba a solventar la situación?  Esperaría, como lo hizo otras muchas veces, tenía la ilusión y las ganas de saber si sus dudas eran acertadas no era una cuestión de querer o no, era una cuestión de saber si alguna vez estuvo equivocado.

domingo, 3 de agosto de 2014

Regalos pasados, presentes perdidos.

Apareciste en el mejor momento. Cuando no te esperaba, cuando ni si quiera contaba contigo. 
Sin embargo tú desapareciste, la ilusión no se perdió y te sustituyó quién se había marchado para siempre.
No fue así... Y en parte me desilusionó perder de vista tu cabello, tus expresiones, tu persona.
Pero la vida es justa, no siempre, pero cuando lo es muestra toda su grandeza para mostrar el poder que tiene. Y me recompensó con quién está por encima de nadie, por encima de todos.
El día de mi cumpleaños, como regalo, como presente...

Ahora desapareces, sin ganas, sin buscarte, sabiendo que será la otra persona con quién con la misma rosa rozará el mismo alma.